Epístola de Pablo a los gálatas
Nueva Versión Internacional (NVI)
Introducción
Galacia era una región con muchas iglesias, no era una ciudad. Esta epístola
está dirigida a todas esas iglesias “elegidas del Ponto, Galacia, Capadocia, Asia y Bitinia”, como las llamó Pedro en 1ª de
Pedro 1:1 13; y como las confirma en 1ª de Pedro 5:13: “Os saluda la Iglesia de
Babilonia, partícipe de vuestra elección, y Marcos, mi hijo”. También son las
mismas iglesias elegidas por Jesús, al enviar a sus discípulos, a predicar, no
a Jerusalén, ni a los gentiles, sino ir y predicar “a las ovejas pérdidas de la
casa de Israel”, que eran los judíos de la dispersión, que se habían desplazado
a vivir en esa misma región. Ver Mateo 10:5-6. También estaban asentadas en esa
misma región las siete iglesias “elegidas que están en Asia” del apocalipsis,
escrito por Juan. Ver Apocalipsis 1:4,11 y 20. En resumen, las iglesias
elegidas de Jesús, de Juan y de Pedro.
El
Espíritu Santo le prohibió a Saulo predicar en estas iglesias, del Asia menor,
donde hoy en día se llama Turquía, según está escrito en Hechos 16: 6-7. Esto
no es capricho divino, ni es algo sin relación, con la elección explícita de
estas iglesias y su prohibición a Saulo predicar en ellas. Aunque después el
mismo Saulo viajara a algunas de las iglesias de esa región, quedó escrito que
el Espíritu Santo le prohibió al grandioso Saulo predicar en esas iglesias
“elegidas”.
Se
espera, por tanto, que los énfasis de Saulo en los temas de esta epístola a los
gálatas, también en la de los colosenses y en la de los efesios, sean más “bien
elegidos” que de costumbre en él. Estas tres epístolas son las que a
continuación serán comentadas. Esperamos ver un lenguaje más trascendente, más
teológico, con menos “tonterías” y menos sensiblerías emocionales, que el tramador
lenguaje Paulino de las dos epístolas a los corintios, gentiles ellos no
iniciados en la historia del pueblo de Israel, a los cuales el grandioso
anticristo menospreció y manipuló como quiso. Y, así y todo, se hace llamar de
ellos “el apóstol de los gentiles”.
Al
estudiar la historia, “se lee que hay mucha similitud entre colosenses y efesios”.
“Se lee que le epístola a los efesios en verdad se llamaba “a los laodicenses”,
que en verdad no era dirigida una iglesia en especial, sino que iba sin título
y que fue repartida en toda Asia”. Todos estos detalles, también nos permiten
considerar toda esta especialísima región como un todo, como la veían Jesús,
Juan y Pedro. “También se lee, que la autoría de “efesios” no es aceptada por
todos los estudiosos, como de Saulo, que posiblemente haya sido escrita por uno
de sus discípulos, y atribuida a Saulo”. Pero como hace parte de este grupo de
epístolas, que los cristianos han llamado su “Palabra de Dios”, entonces hace
parte integral de la gran suplantación y la falacia que ha extraviado al mundo
entero.
Valga
decir que, si no pretendieran que estas epístolas son “la palabra de Dios”, no
habría ni el más mínimo problema con ellas. Serían valiosas enseñanzas morales,
y sublimes verdades sobre Dios, pero sujetas al normal error humano. Serían
grandes obras literarias. Su único problema es que pretenden que las personas
acepten que son palabras iguales en valor a las de Jesús. Esa es la suplantación,
eso hace que Roma sea la gran Babilonia, la ramera que adora a Jesús y adora,
como palabras de Dios, las enseñanzas de Saulo, un insignificante ser humano al
lado de Jesús, un humano como cualquiera, que escribió inspirado por Dios, a
veces, pero a veces escribió de su propia cuenta. El que haya escrito verdades
sublimes, inspirado por Dios, eso no hace esas palabras iguales a las de Jesús,
es solo un profeta con aciertos y errores, como todos los demás profetas, ni
más, ni menos. Y vaya que hay bastantes errores humanos en todas esas cartas
atribuidas a Saulo y a sus seguidores.
Nueva Versión Internacional (NVI)
Capítulo 1
1
Pablo, apóstol, no por investidura ni mediación humanas, (Saulo
salta por encima de la autoridad de los doce apóstoles verdaderos de Jesús, que
son, en sí mismos, esa “investidura y mediación humanas” que él menciona, para
decir que no viene de la autoridad dada por Jesús a los doce. Aquí Saulo enseña
a sus extraviados seguidores, a desestimar a Pedro y también a todos los doce.
Tiene que recurrir Saulo a menospreciarlos, a subvalorarlos, para que sus
seguidores no reconozcan en los doce, la suprema autoridad en el cristianismo,
puesto que los doce jamás lo iban a nombrar apóstol de Jesús, ni le iban a dar
autoridad de apóstol, ni a Saulo, ni a alguno otro ser humano. Ser apóstol es
igual que ser doce, es un número cerrado, excluyente. La institución divina de
los doce, recibe estos vedados ataques de Saulo, porque solo así logrará
desviar a los seguidores de Cristo, el mesías perfecto, hacia su persona llena
de imperfecciones humanas. Solo cuando uno empieza a considerar, de verdad, que
Saulo es el anticristo, entiende todas estas falacias sutiles, y es cuando se despejan
las nieblas, las nubes se diluyen, y se ve la verdad, por tantos siglos
pisoteada, cuando se ve a la humanidad extraviada en pos del lobo romano, en
pos del César romano espiritual, en pos del usurpador, el grandioso Saulo de Tarso.)
sino
por Jesucristo y por Dios Padre, que lo levantó de entre los muertos; (Saulo
dice que Jesús lo nombró apóstol, pero nadie más, con la autoridad de los doce,
lo dice. Es solo Saulo dando testimonio de sí mismo. Como en las otras
epístolas, en las que, por este detalle de autoproclamarse apóstol, los
estudiosos reconocen la autoría de Saulo. No es que estén reconociendo que
Saulo es apóstol de Jesús, sino reconociendo por esa frase falaz, la autoría Paulina
de esas epístolas. Esta epístola inicia con la habitual propaganda de sí mismo,
algo tan contrario al verdadero cristianismo, diciendo de sí mismo Saulo, que
es un apóstol de Jesucristo. Tiene que hacerlo él, ya que ninguno de los doce,
ni Jesús, lo nombró apóstol. Entonces Saulo se autodenomina apóstol, puesto que
le es necesario crear esta falsa identidad de apóstol, para ser recibido como
con verdadera autoridad, entre los cristianos, para poder extraviarlos de las
enseñanzas de Jesús hacia las de él.) 2 y todos los hermanos que están conmigo, (Saulo,
en esta frase, intimidatoria hacia sus lectores, está haciéndoles creer, que le
sigue un grupo de indeterminado de creyentes, y que todos aceptan su autoridad.
Es solo una frase, y con ella trata de impresionar a sus lectores para que le
crean que sí es apóstol, que sí tiene autoridad, que sí tiene seguidores.) a las iglesias
de Galacia: (Estas iglesias de Galacia, no son territorio de los gentiles,
desconocedores de la ley del pueblo de Israel, como los corintios y los romanos.
Esta región es la de las ovejas pérdidas de la casa de Israel, según los llamó
Jesús. Por esto, a continuación, Saulo hace alusión al hecho de estar ellos
rescatados del mundo gentil, es muy astuto Saulo para hablar a cada grupo según
lo pueda manipular mejor. Aquí se ve el manejo diferente que les da, ahora sí, “a
las iglesias elegidas”.) 3 Que Dios nuestro Padre y el Señor
Jesucristo les concedan gracia y paz. 4 Jesucristo dio su vida por nuestros
pecados para rescatarnos de este mundo malvado, según la voluntad de nuestro
Dios y Padre, (Saulo habla en nombre de Jesús y en nombre del Padre, es muy
atrevido y por ello consigue extraviar a sus lectores ingenuos. Usurpa el
nombre de Dios para atraer a sí a los ingenuos. Es un maestro consumado de la
falacia.) 5
a quien sea la gloria por los siglos de los siglos. Amén.
No hay otro evangelio
6
Me asombra que tan pronto estén dejando ustedes a quien los llamó por la gracia
de Cristo, para pasarse a otro evangelio. (En esta frase Saulo les
condiciona que él es el que los llamó a Cristo, que no son libres, sino que son
su propiedad, de aquí salen las riñas y peleas, por la posesión y control de
las ovejas, entre líderes de la iglesia actual.) 7 No es que haya otro evangelio, sino
que ciertos individuos están sembrando confusión entre ustedes y quieren
tergiversar el evangelio de Cristo. (Aquí Saulo describe con
toda exactitud, lo que él está haciendo, para desviarlos de la doctrina de
Cristo, y ni se han dado por enterados, durante estos largos dos mil años, le
creen de buena gana, tal cual lo profetizó Jesús, que otro vendría en su propio
nombre, y a ese le creerían las naciones, dejando de lado las enseñanzas del
Mesías verdadero, y que este falso mesías vendría para probar a todos los
moradores de la Tierra. Cada cristiano debe ser probado a fondo, para demostrar
que sí oye la voz del pastor Jesús, y no la de Saulo, el usurpador, el lobo
romano disfrazado de pastor Israelí.) 8 Pero aun si alguno de
nosotros o un ángel del cielo les predicara un evangelio distinto del que les
hemos predicado, ¡que caiga bajo maldición! 9 como ya lo hemos dicho, ahora lo
repito: si alguien les anda predicando un evangelio distinto del que
recibieron, ¡que caiga bajo maldición! (Saulo sella con suprema
maestría su engaño, al amenazarlos con maldiciones, al conminarlos a aceptar,
como verdadera palabra de Dios, este evangelio plagado de falacias, que les
está induciendo a creer, por lo que les cierra las mentes, para creer en los
que expresen palabras contrarias, a las palabras que él les hace creer como
verdaderas, los induce a rechazar el verdadero evangelio de Jesús, sin saberlo.
y se las aceptan como palabras de Dios
mismo. Oh ingenuos, ceden como corderos, a sus veladas amenazas, se convierten
en sus prisioneros espirituales.) 10 ¿Qué busco con esto: ganarme la
aprobación humana o la de Dios? ¿Piensan que procuro agradar a los demás? Si yo
buscara agradar a otros, no sería siervo de Cristo. (Este
grandioso artista de la falacia, es descarado de frente con sus seguidores, que
le creen todo lo que les dice. Justamente Saulo busca es la aprobación de los
seguidores. No la de Dios. El ser aprobado por sus seguidores, generación tras
generación, es lo que le ha dado vigencia a sus falacias, durante estos dos mil
años. El hablarles de no desear su aprobación los induce a aprobarlo. Estas
técnicas, hoy se llamarían, programación neuro lingüística. De paso le aceptan
que es siervo de Cristo, los aleja de sospechar que en realidad es el usurpador,
en las mentes de sus ingenuos seguidores.)
Pablo, llamado por Dios
11
Quiero que sepan, hermanos, que el evangelio que yo predico no es invención
humana. 12 No lo recibí ni lo aprendí de ningún ser humano, sino que me llegó
por revelación de Jesucristo. (Qué jugada magistral la
que hace el grandioso Saulo, al afirmar, que recibió el supuesto evangelio que
predica, no a través de los doce apóstoles autorizados de Jesús, sino disque
por revelación directa de Jesucristo. Aquí deja ver su verdadera cara de
anticristo camuflado, y no puede evitarlo. Pero para evitar que sus ingenuos
seguidores vean la usurpación, les teje este sutil velo de confusión. Aquí
Saulo está tejiendo su red de falacias atrevidas, con las que ha seducido al
orbe entero durante largos dos mil años. Pero a su vez, es aquí donde todo
estudioso, no engañado por Saulo, puede ver la suplantación, en su estado más
original. Aquí Saulo dice que los doce apóstoles verdaderos de Jesús, para él,
nada valen, como la fuente autorizada de la enseñanza de Jesús. Para Saulo, no
cuentan como los únicos doce representantes autorizados de Jesús. Aquí Saulo
pretende tirar por la borda, la autoridad de los doce. Por tanto, este de las enseñanzas
que dejó Saulo, es justamente, ese otro evangelio, que el mismo Saulo quería
que sus extraviados seguidores no recibieran, pero al terminar recibiéndolo
como palabra de Dios, la humanidad entera, se desvía del verdadero evangelio de
Jesús, en pos de insignificantes enseñanzas de hombres.)
13
Ustedes ya están enterados de mi conducta cuando pertenecía al judaísmo, (Aquí
el fariseo Saulo, da por sentado que es famoso entre ellos, que es alguien
importante, algo totalmente opuesto a la verdadera humildad cristiana. Impone
su yo, impone su personaje importante a ellos con sutileza. Con estos
comentarios, Saulo va mordisqueando la gloria que solo Jesús debe tener, y
atrae la atención de los seguidores de Jesús hacia su insignificante figura
humana, comparada con la figura divina de Jesús. Consigue desviarlos hacia él.
Además, le aprenden a ser ególatras, le aprenden a dejar de lado la humildad.
Lo repiten sus ingenuos seguidores, son ególatras en todo el orbe, seducidos
por dos mil años, sin darse cuenta que no le están creyendo a Jesús sus
enseñanzas, sobre ser el último y sobre la humildad.) de la furia
con que perseguía a la iglesia de Dios, tratando de destruirla. 14 (Aquí
Saulo reconoce que es el perseguidor con rabia del Espíritu Santo. Es el
blasfemador del Espíritu Santo. Y el que ha blasfemado del Espíritu Santo,
jamás tiene perdón, según Jesús. Para que le veamos la cara de usurpador, para
que entendamos que Saulo es un blasfemo del Espíritu Santo, fue que Jesús nos
enseñó esto. Ver Mateo 12:32 y Lucas 12:10.) En la práctica
del judaísmo, yo aventajaba a muchos de mis contemporáneos en mi celo exagerado
por las tradiciones de mis antepasados. (Si fuera cristiano de
verdad, no diría todas estas egolatrías, no se jactaría de sí mismo, a menos
que desease llamar la atención de los lectores sobre su persona. Y menos, las
enseñaría así a sus ingenuos seguidores. Los ha contaminado de su ego durante
estos veinte largos siglos.) 15 Sin embargo, Dios me había
apartado desde el vientre de mi madre y me llamó por su gracia. (Es
solo Saulo dando testimonio de esto. Cualquiera puede decirlo. No por ello es
verdad. Le creen por la predisposición a creerle. Son miles de años, siendo
aprobado por sus seguidores, lo cual enceguece más las mentes de los lectores.) Cuando él
tuvo a bien 16 revelarme a su Hijo para que yo lo predicara entre los gentiles,
(Saulo
miente descaradamente, sus seguidores le creen, que el Padre se puso en
contacto directo con Saulo, para revelarle, por aparte de los doce a Jesús, una
revelación superior, celestial. Jesús enseñó que solamente a través de Él, se
puede tener contacto verdadero con el Padre. Es por estas atrevidas falacias,
que Saulo ha logrado confundir y extraviar a miles de millones de ingenuos,
durante dos mil largos años.) no consulté con nadie. 17 Tampoco
subí a Jerusalén para ver a los que eran apóstoles antes que yo, sino que fui
de inmediato a Arabia, de donde luego regresé a Damasco. (El
grandioso Saulo aquí se desmarca de los doce apóstoles verdaderos, se desmarca
de la verdadera autoridad del cristianismo, establecida por Jesús. Y sus
ingenuos seguidores le creen de buena gana. Saulo desestima a los doce, los
desacredita, los declara innecesarios, y extravía al orbe con esas falacias. Al
leer esta frase sus seguidores dan por hecho que Saulo si es apóstol, porque
menciona a los que “eran apóstoles antes que él”.)
18
Después de tres años, subí a Jerusalén para visitar a Pedro, y me quedé con él
quince días. 19 No vi a ningún otro de los apóstoles; sólo vi a Jacobo, el
hermano del Señor. 20 Dios me es testigo que en esto que les escribo no miento.
(Aquí
les da a entender que Saulo es de igual autoridad que Pedro, que no necesitó a
Pedro, que lo visitó, pero no en sumisión a su autoridad, dentro del
cristianismo. Saulo maneja magistralmente la falacia, la inducción a error, por
eso es el grandioso antagonista de Jesús, no es cualquier bobito, ni es un
principiante en mentir. Es el más refinado maestro del engaño. Fuera de esto Saulo
pone por testigo a Dios. Esto es una falacia. Saulo sabe que no pueden hablar
con ese testigo divino, hasta el día del juicio final, cuando sea tarde para
sus seguidores. El haber visitado a Pedro y recibir trato de “amado hermano” de
parte de Pedro, no lo hace apóstol, ni le confiere el valor de palabras de Dios
a sus enseñanzas, es solo un humano más diciendo palabras humanas.) 21 Más tarde
fui a las regiones de Siria y Cilicia. 22 Pero en Judea las iglesias de Cristo
no me conocían personalmente. 23 Sólo habían oído decir: «El que antes nos
perseguía ahora predica la fe que procuraba destruir.» 24 Y por causa mía
glorificaban a Dios. (Está claro que desea robar la gloria
de Jesús. Solo por causa de Jesús se puede glorificar a Dios. Entonces pretende
que el hecho de dejar de hacer lo peor, como lo es perseguir a los cristianos,
blasfemar del espíritu Santo, ese dejar de hacer, sea en sí mismo algo bueno.
Si era lo peor, de lo peor de la humanidad, y dejó de serlo, no merece ningún
premio, ni mucho menos, por ello pretender que sea ese dejar de ser pervertido,
algo tan maravilloso, como pretende Saulo que por ello se glorifique a Dios.
Saulo pretende que su dejar de perseguir es algo a la par con la salvación que
trae Cristo por su sacrificio en la cruz y su resurrección.)
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Capítulo 2
Los apóstoles aceptan a Pablo
(Este título, añadido a la epístola, por
los traductores de las escrituras, dice algo que no dice en la epístola, y
refleja el alto grado de seducción, falacia y extravío, aún de los más estudiosos.
Ninguno de los doce apóstoles habla sobre este tema, de la inclusión de Saulo,
al exclusivo “grupo cerrado” de los doce apóstoles. Por tanto, dar por hecho
que lo que aquí se escribió es verdad, es ingenuidad de los seguidores de Saulo.
En ninguna frase de este capítulo, dice que los apóstoles aceptaron a Saulo
como apóstol de Jesús, que es lo que Saulo necesita que crean sus ingenuos
seguidores, por lo que repite muchas veces en sus epístolas, que él es apóstol
de Jesús. Si no obtiene que lo reconozcan como apóstol, sus extraviados
seguidores, Saulo no tiene autoridad “celestial” en sus mentes. Contrario a
esto, si uno es cristiano verdadero, es muy celoso, es vigilante, con lo que se
dice sobre los doce, y más si se trata de críticas a su autoridad delegada por
Jesús. Este capítulo de Gálatas es un robo a los lectores, es una magistral
estafa, es para exaltar a Pablo, a costillas de desprestigiar a la autoridad de
los doce apóstoles, y está dedicado especialmente a menospreciar la autoridad
de Pedro. Vean lo que está escrito en la epístola, sin dejarse inducir a error
por tan excelso maestro de la falacia, el grandioso Saulo, el humano más
importante, más astuto, más sagaz, el falaz usurpador de la autoridad del
Cristo en las mentes de los lectores ingenuos, el camuflado usurpador del trono
celestial.)
1 catorce
años después subí de nuevo a Jerusalén, esta vez con Bernabé, llevando también
a Tito. 2 Fui
en obediencia a una revelación, y me reuní en privado con los que eran
reconocidos como dirigentes, (Saulo
desconoció la autoridad de los doce durante catorce años y no subió a ellos a
Jerusalén, buscando lo correcto, buscando enseñanza de la doctrina apostólica.
Saulo no subió a Jerusalén a reconocer la autoridad de los doce, sino que dice
que subió independiente de la presencia de los doce, la cual ya dejó claro que
no le importa. Subió supuestamente, “obedeciendo una misteriosa revelación
propia”, muy al estilo de Saulo y sus frases ambiguas. Al escribir Saulo, que
se reunió en privado con “algunos de ellos”, está dando testimonio de sí mismo,
y es solo su palabra, hablando en nombre de ellos. Es más, al referirse a
“algunos de ellos”, sin nombres propios, les está menospreciando la importancia
de su autoridad en el cristianismo, para que sus seguidores los menosprecien
también, pues solo así Saulo roba esa autoridad que no le pertenece.) y
les expliqué el evangelio que predico entre los gentiles, para que todo mi
esfuerzo no fuera en vano.
(Está confesando que en realidad lo motiva a hacer este viaje, solo buscando
proteger su ministerio, que sus ingenuos seguidores no entienden que es un ministerio
extraviador, ministerio probador de la fe de los cristianos. Subió, porque
necesita unir su ministerio a la autoridad apostólica, lo cual hace con hábiles
y falaces frases, de él solo, hablando en nombre de los apóstoles verdaderos.)
3 Ahora
bien, ni siquiera Tito, que me acompañaba, fue obligado a circuncidarse, aunque
era griego. 4 El
problema era que algunos falsos hermanos se habían infiltrado entre nosotros
para coartar la libertad que tenemos en Cristo Jesús a fin de
esclavizarnos. 5 Ni
por un momento accedimos a someternos a ellos, pues queríamos que se preservara
entre ustedes la integridad del evangelio. (Saulo, confundiendo a los doce, con
algunos cristianos infiltrados entre sus propios seguidores, en esta frase, en
forma indirecta y vedada, ataca la suprema autoridad de los doce apóstoles
verdaderos, tratando de destruir su valor de única autoridad humana en el
cristianismo. Esta frase es uno de los principios de la rebelión vedada de
Saulo, incitando a sus seguidores a desechar la autoridad total de los doce. Es
tan astuto que da a entender que es posible que no se haya sometido a la
autoridad de los doce, para preservar la libertad de sus seguidores. Los seduce
con palabras engañosas.) 6 En
cuanto a los que eran reconocidos como personas importantes —aunque no me
interesa lo que fueran, porque Dios no juzga por las apariencias—, esos tales
no me impusieron nada nuevo. (Saulo dice que se reunió con algunos
de los doce. Ellos no dicen eso en escrito, predicación o discurso alguno, aunque
Pedro lo llama el amado hermano Pablo, nada más, y dice que Saulo tiene puntos
de difícil inteligencia, que se prestan para ser mal interpretados, por los
seguidores no conocedores de las palabras de Jesús. Obviamente los doce no
salieron a descalificarlo, como Saulo sí los está descalificando, en estas frases
pérfidas y sediciosas, ni los doce se pusieron a sembrar divisiones, como sí lo
necesitaba hacer Saulo, menospreciando la autoridad de los doce, para robar su
autoridad en las mentes de sus ingenuos seguidores. Ni se pusieron los doce a
arrancar la cizaña del huerto, según enseñó Jesús que no hicieran, aunque mucho
lo desearan, porque haciendo así dañarían la fe en Jesús del incipiente
cristianismo. Nunca hablaron de un nombre en especial, como de un único,
supuesto anticristo, sino que advertían a todos, sobre los muchos anticristos
que vendrían adentro del cristianismo. Porque afuera del cristianismo no hay
anticristos. No hay usurpadores o desviadores de la fe, afuera del rebaño, sino
que todo anticristo obra desde adentro del cristianismo, trata de robar la
gloria que Jesús con nadie comparte, de ser Dios y sus palabras ser la palabra
de Dios. Es adentro del cristianismo, el grandioso ministerio extraviador de
Saulo, el más grande y más camuflado anticristo, que la historia humana haya
podido engendrar. Más grande y más importante anticristo, más camuflado y
magistral que Saulo, no ha habido ni lo habrá. Este librito, por esa
consideración, es necesario que sea divulgado por debajo de los pulpitos y por
debajo de los predicadores, que sea como un secreto a voces, un susurro
subterráneo, para que no afecte la fe del rebaño. Que sea una verdad secreta
para las masas, pero visible solo para los estudiosos, para los que buscan,
para los que van deseando a fondo la verdad total y absoluta. Este librito no
será multitudinario, porque es necesario que Saulo ponga a prueba a toda la
cristiandad, con su ministerio extraviador, a ver si se dejan desviar de
Jesús. 7 Al contrario, reconocieron que a mí se me había
encomendado predicar el evangelio a los gentiles, de la misma manera que se le
había encomendado a Pedro predicarlo a los judíos. (Está
mintiendo y sus seguidores le creen, puesto que Pedro dijo muy claro, en ese
mismo concilio, que a él se le había dado la misión de ser el apóstol de los
gentiles. Ver hechos 15:7. Cuando en casa de Cornelio tuvo la visión de la
manta llena de animales puros e impuros. Esas solo son las palabras falaces de
Pablo sobre una supuesta reunión “privada” con los dirigentes, con los doce
verdaderos, y en esa supuesta reunión cambiaron las misiones del cristianismo a
favor de Pablo y los apóstoles nada dijeron de eso. Ingenuos los que creen
estas cartas, sin leer y diferenciar, lo que dijeron, Jesús, Pedro y Juan.) 8 El mismo Dios que facultó a Pedro como apóstol de
los judíos me facultó también a mí como apóstol de los gentiles. (Saulo
repite la mentira: que él fue enviado por Jesús a los gentiles y Pedro fue
enviado a los judíos. Cuando en realidad Pedro fue enviado a los gentiles. Esta
elaborada falacia de Saulo, para tratar de quedarse con la autoridad terrenal
en el ministerio a los gentiles, no ha sido refrendada por la autoridad del
cristianismo, por Pedro, Santiago o Juan, ni por alguno de los otros nueve
apóstoles verdaderos.) 9 En
efecto, Jacobo, Pedro y Juan, que eran considerados columnas, al reconocer la
gracia que yo había recibido, nos dieron la mano a Bernabé y a mí en señal de
compañerismo, de modo que nosotros fuéramos a los gentiles y ellos a los
judíos. (Pero solo son palabras de Saulo, que dice que lo aceptaron,
cuando en realidad nada dice en este párrafo, para creer que los ausentes doce,
sí lo aceptaron. Porque Saulo lo dice una y otra vez, dan por hecho sus
ingenuos seguidores que así fue, y que en esa visita fue reconocido como el
treceavo, el aborto, el no nacido, el que murió en el vientre, el que nació
muerto, según palabras del mismo Saulo en otros de sus fatales párrafos. Ver 1ª
a los corintios 15:8.) 10 Solo
nos pidieron que nos acordáramos de los pobres, y eso es precisamente lo que he
venido haciendo con esmero.
(Está Saulo enseñando a sus seguidores, la levadura del
fariseísmo hipócrita, del que tanto advirtió Jesús, al alardear Saulo, con
bombos y platillos, de su supuesta caridad hacia los pobres. Ha alardeado
Saulo, de su supuesta caridad, durante largos dos mil años, y ante miles de
millones de lectores. Eso es anticristiano, entiéndanlo de una vez por todas. Y
está poniendo Saulo, en boca de Santiago, Pedro y Juan, palabras y obras que no
se sabe si fueron así. El falaz Saulo sigue mintiendo, y los ingenuos le siguen
creyendo, y se siguen postrando, ante la falsa divinidad de las palabras
escritas, por un humano insignificante, como cualquiera de nosotros, jamás
comparables, con las palabras que habló Jesús, aquí en la Tierra, que sí son en
verdad, “la palabra de Dios”.)
11 Pues
bien, cuando Pedro fue a Antioquía, le eché en cara su comportamiento
condenable. 12 Antes
que llegaran algunos de parte de Jacobo, Pedro solía comer con los gentiles.
Pero, cuando aquellos llegaron, comenzó a retraerse y a separarse de los
gentiles por temor a los partidarios de la circuncisión. 13 Entonces los demás judíos se unieron a Pedro en su
hipocresía, y hasta el mismo Bernabé se dejó arrastrar por esa conducta
hipócrita.
(Saulo está acusando, nada más y nada menos, que a la autoridad
del cristianismo. Ver Mateo 16:19 y 18:18. “todo lo que ates en la tierra será
atado en el Cielo”. Lo condena y lo ataca para destruir su autoridad. Dice que
Pedro es hipócrita, cuando ese es un distintivo de los fariseos, como Saulo. Si
Jesús les dio carta blanca a los doce apóstoles, Saulo no tiene ni la más
mínima autoridad para cuestionar los hechos de Pedro. Pero Saulo necesita
destruir la autoridad de Pedro, para poder robar, en las mentes de sus ingenuos
seguidores, esa autoridad exclusiva de Pedro, de los doce, y de nadie, además
de ellos.) 14 Cuando
vi que no actuaban rectamente, como corresponde a la integridad del evangelio, (Aquí
aprovecha Saulo para sentar cátedra de rectitud a costillas de la autoridad de
los doce. Por estas nefastas frases, los doce apóstoles son menospreciados
durante estos dos mil años. Es un golpe magistral de Saulo, no a Pedro, ni a los
doce, sino a las mentes de sus extraviados seguidores.) le
dije a Pedro delante de todos: (Y lo está diciendo ahora, y lo ha dicho una y otra
vez, por dos mil años, delante de miles de millones de lectores cristianos, que
Pedro no vale ni poquito en el cristianismo, que es un hipócrita, que es
despreciable. Está atacando la autoridad suprema de Pedro a nivel humano,
tratando de dejar al cristianismo sin su autoridad apostólica. Es
importante ver que le dijo esto “delante de todos”. Es una conducta típica de
un hipócrita fariseo, que pretende robar la autoridad de Pedro. Procede así,
para ser visto y alabado por los hombres, para extraviar a sus ingenuos
seguidores. Si en verdad hubiera sucedido lo que el falaz dice, y si Saulo
fuera de verdad cristiano, entonces Saulo hubiera hablado con Pedro a solas,
ver Mateo 18:15-20. Y por ningún motivo hubiera escrito tan desafortunadas
frases. Así es “como de verdad corresponde a la integridad del evangelio”, que
Saulo tan ladinamente invoca.) «Si tú, que eres judío, vives como si no lo fueras,
¿por qué obligas a los gentiles a practicar el judaísmo? (Es
falso que Pedro estuviera obligándolos a judaizar, eso no se deduce de los
hechos expuestos por Pablo. Además, no conocemos la versión de Pedro sobre lo
ocurrido. Por lo que es muy fácil para Saulo, escribir mal de Pedro a
kilómetros de distancia, y a sabiendas que Pedro no iba a contestar. Aquí el
hipócrita queda como un héroe (falso héroe), y hace ver a la autoridad del
cristianismo como una pandilla de villanos, aparentadores, superficiales, lo cual
en verdad no son. Eso es lo que Saulo busca para robar la autoridad de los doce
y la gloria del Cristo verdadero, por ello es el anticristo. Y los extraviados
seguidores del impostor, compran sin revisarlas, todas las versiones de los
hechos escritos por Saulo, obvio, son sus seguidores, les teje un velo con
hilos sutiles, a sus mentes, y Pedro no está allí para desmentir lo escrito.)
15 Nosotros
somos judíos de nacimiento y no “pecadores paganos”. (Es increíble que en nombre de Jesús se diga semejante
blasfemia, pero es que Saulo está escribiendo para los de Galacia, territorio
de las ovejas pérdidas de la casa de Israel, y trata de comprarlos y engañarlos
con frases zalameras. Aquí judaíza Saulo, hace lo mismo que criticaba, en la
supuesta conducta inventada a Pedro. Es el mismo fariseo hipócrita de siempre,
un lobo romano que no dejó de ser lobo, pero ahora está hablando como una oveja
israelita, lo cual puede hacer, pues es ciudadano romano y es Israelita. Como
si ser judío lo hiciera libre de pecado, como si ser pagano lo hiciera pecador
por sí mismo. Es mentira, es absurdo.) 16 Sin embargo, al reconocer que nadie es justificado
por las obras que demanda la ley, sino por la fe en Jesucristo, también
nosotros hemos puesto nuestra fe en Cristo Jesús, para ser justificados por la
fe en él y no por las obras de la ley; porque por estas nadie será justificado.
(Estas
frases parecen perfectas, pero son de muy difícil inteligencia como las llamó
Pedro, por lo que, durante miles de años, las almas se han perdido diciendo que,
con solo confesar que Jesús es Cristo, ya tienen la salvación asegurada. Ver 2ª
de Pedro 3:16. Que ingenuidad. Es que Saulo necesitaba esto para extraviarlos y
que además creyeran que Saulo, además de Jesús, tiene “palabra de Dios” y como
ya supuestamente están salvados, no importa si siguen a Saulo también. Y para
su desventura, reciben esas enseñanzas humanas, como si fueran palabras
escritas por su Dios.)
17 Ahora
bien, cuando buscamos ser justificados por Cristo, se hace evidente que
nosotros mismos somos pecadores. ¿Quiere esto decir que Cristo está al servicio
del pecado? ¡De ninguna manera! 18 Si
uno vuelve a edificar lo que antes había destruido, se hace transgresor.
(Pone Saulo frases incoherentes, confusas, como estas últimas, y se enredan
ingenuamente en ellas sus seguidores. Esto no tiene que ver con la salvación) 19 Yo, por mi parte, mediante la ley he muerto a la
ley, a fin de vivir para Dios. 20 He
sido crucificado con Cristo,
y
ya no vivo yo, sino que Cristo vive en mí. Lo que ahora vivo en el cuerpo, lo
vivo por la fe en el Hijo de Dios, quien me amó y dio su vida por mí. 21 No desecho la gracia de Dios. Si la justicia se
obtuviera mediante la ley, Cristo habría muerto en vano». (Saulo habla,
como si en verdad fuera la máxima autoridad cristiana. Este de estar
crucificado con Cristo, es el más noble y alto deseo del alma. Esta es una
enseñanza preciosa, ya que todos deseamos tener a Cristo, vivo, en carne,
adentro de nosotros, ocupando el lugar de nuestra alma, siendo nuestra alma Él.
Pero no es posible que esto sea dicho por un cristiano, como un hecho ya
consumado, y más si es sabedor de su pequeñez y su indignidad. Pero el
grandioso Saulo no puede ser humilde y aquí está siendo, cómo él es, audazmente
presuntuoso, desvergonzado, y está engañando a sus seguidores al tratar de
robar la cruz de Cristo, para gloria de Saulo, sin haberla sufrido. Estas
falacias confunden tanto a sus ingenuos seguidores, que no se dan cuenta que
aceptan que dan por hecho que Saulo está en la cruz con Cristo, aunque todos
sabemos que no lo estamos. Aquí se ve clarito el ministerio de la suprema
suplantación de la identidad de Cristo, por el anticristo, el usurpador, y por
miles de años ni lo han visto. Es maravilloso poder entender, que personaje tan
genial, aunque del lado oscuro, es grandioso y magistral usurpador ese Saulo.)
Epístola de Pablo a los gálatas
Nueva Versión Internacional (NVI)
Capítulo
3
La
fe o la observancia de la ley
1 ¡Gálatas torpes! (Saulo
les baja la autoestima a todos sus miles de millones de lectores, a través de
esta frase a los gálatas, puesto que todos sus sumisos seguidores, aceptan
estas ofensivas palabras, como las palabras de “su Dios” como la “palabra de
Dios”, que adefesio. Saulo lo hace para lograr que lo vean arriba de ellos, para
afianzar su autoridad falsa sobre ellos, para enseñorearse sobre ellos. Los
menosprecia y les dice torpes, les dice insensatos. Ambas palabras usadas en la
traducción reflejan incapacidad de conocer, y este menosprecio lo aceptan de
buena gana, sus ingenuos y serviles seguidores, sabiendo que Saulo no es Dios,
sino un hombre imperfecto, igual que ellos. Cunado Jesús hablaba de una
generación adúltera y perversa, tenía todo el derecho de hacerlo, pues es el
juez natural de la humanidad y aceptamos que Jesús tiene razón, somos adúlteros
y perversos todos, con la excepción de nadie, aunque también Jesús nos llamó
hijos de Dios. Jesús nos enseña entonces, que tenemos dos polos, el bien y el
mal, no el bien solamente, ni solamente el mal. En ser poseedores de la ciencia
del bien y del mal, desde Adán y Eva, reside nuestro libre albedrío. Todos
somos bipolares, según Jesús. El insignificante Saulo, al compararlo con Jesús,
al lograr que le adoren estas palabras de juicio y ofensivas, como “palabra de
Dios”, también está usurpando el trono de juez, de la humanidad, que solo le
pertenece a Jesús, y a nadie además de Él.) ¿Quién los ha hechizado a ustedes, ante
quienes Jesucristo crucificado ha sido presentado tan claramente? (Recordar
que Saulo es el gran seductor y extraviador de la humanidad, autorizado por
Dios, para poner a prueba a toda la humanidad a ver si se dejan extraviar de
las palabras de Jesús. Y justamente,
para evitar que se den cuenta sus seguidores, les habla de artes de extravío, hechas
a ellos, como si alguien los hubiera seducido, fascinado o hechizado con enseñanzas
que no eran las de Saulo, y les predispone a aceptar, que la verdadera
enseñanza del evangelio, es la de Saulo y no lo es la de otros evangelizadores.
Obvio que puede pensarse aquí en una descalificación a las enseñanzas y
autoridad de los doce apóstoles verdaderos. Les hace presuponer de antemano, a
sus lectores, que él, Saulo, sí les presentó a ellos a Jesús, incluso cuando,
en verdad, aparentando presentarles a Jesús, les estaba presentando a Saulo,
estaba exaltando a Saulo. Si usted da por hecho que Saulo es veraz, estas
frases no se evalúan, da por sentado que todas son verdad y que Saulo es un
héroe, que lo ha “salvado” del error. Nada más lejos de la verdad. Pero si da
por posible que no necesariamente Saulo es veraz, ni, mucho menos, sus palabras
son la palabra de Dios, ve entonces la forma en que Saulo, magistralmente, los
induce a error.) 2 Solo quiero que me respondan a esto:
¿Recibieron el Espíritu por las obras que demanda la ley, o por la fe con que
aceptaron el mensaje? 3 (¿De cuál mensaje
recibido habla Saulo? ¿el mensaje de Saulo? Saulo
los induce a creer, que con leer las epístolas que él les escribió, ya con eso
recibieron, nada más y nada menos, que el Espíritu santo. Esto es una blasfemia
contra el Espíritu santo, porque solo se recibe el Espíritu santo verdadero, con
las palabras de Jesús, las de los cuatro evangelios, y las de nadie además de
estas. Porque son ellas en sí mismas el Espíritu Santo, la palabra del Padre y
de Jesús, que es su Espíritu. Solo en medio de los cuatro evangelios está el
cordero, solo allí está la verdadera presencia de Dios. Si deseas estar en su
presencia has de leer los cuatro evangelios. Ver apocalipsis 4:6-11) ¿Tan
torpes son? (realmente les está diciendo torpes en sus caras,
tanto a los gálatas, como a los miles de millones de desprevenidos lectores,
durante estos largos dos mil años. Les está diciendo que son torpes, que son
insensatos, incapaces de entender, si no creen que son divinas, estas palabras
humanas del grandioso Saulo. Los está menospreciando
en su capacidad de entender, los está condicionando, de tal forma, que si
desconfían de la divinidad de las palabras de Saulo, “son torpes”. Tanto a los
gálatas como a todos los miles de millones que han leído esta epístola, los ha
confrontado diciéndoles que si dudan del carácter divino de las enseñanzas de
Saulo, son unos torpes. Esto es programación de sus mentes.) Después de haber comenzado con el Espíritu, (Saulo
insiste que ya, con las palabras humanas de Saulo, recibieron la palabra de
Dios, recibieron a Dios, recibieron el Espíritu santo, los engaña, con palabras
fáciles de mal interpretar, a los gálatas y a los miles de millones de sus lectores
sumisos.) ¿pretenden ahora perfeccionarse con esfuerzos
humanos? 4 ¿Tanto
sufrir, para nada? (¿Sufrir quién? ¿Jesús o Saulo? Saulo
les echa en cara, su supuesto esfuerzo, de gastarse su vida predicando, “el
evangelio según Saulo”, el falaz evangelio del grandioso anticristo. Les está
cobrando el esfuerzo y el haber sufrido por ellos. Es el colmo que no vean
cuanta perfidia, cuanta falacia.) ¡Si es que de veras fue para
nada! 5 Al
darles Dios su Espíritu y hacer milagros entre ustedes, (Saulo
los induce a creer que ese espíritu, esas enseñanzas, son las de él, que les
fueron dadas con milagros, también de Saulo, que crean en Saulo, por los
milagros de Saulo. Les está haciendo creer que Saulo les dio el espíritu santo
con las palabras de Saulo. Esto es usurpar el espíritu de Dios en las mentes de
sus ingenuos seguidores.) ¿lo
hace por las obras que demanda la ley o por la fe con que han aceptado el
mensaje? (Saulo repite
esta misma frase falaz del versículo 2. A partir de esta frase mentirosa dan
por hecho que al aceptar con fe las enseñanzas de Saulo, aceptaron a Jesús.) 6 Así
fue con Abraham: «Le creyó a Dios, y esto se le tomó en cuenta como justicia». 7 Por lo tanto, sepan que los
descendientes de Abraham son aquellos que viven por la fe. 8 En efecto, la Escritura,
habiendo previsto que Dios justificaría por la fe a las naciones, anunció de
antemano el evangelio a Abraham: «Por medio de ti serán bendecidas todas las
naciones». 9 Así
que los que viven por la fe son bendecidos junto con Abraham, el hombre de fe. (Saulo,
con estas sutiles palabras, amarra la fe de los cristianos, a que crean en sus
enseñanzas, porque al hablar de esa fe, habla de la aceptación de las
enseñanzas de Saulo. Si creen en Abraham, en la promesa, ellos reciben la fe
por medio de Saulo y sus enseñanzas, que son su espíritu. Saulo toma cautivo a
Abraham, y a la promesa, en estas frases de difícil inteligencia, para que sus
seguidores den por hecho, que si creen en Saulo serán iguales a Abraham. Saulo
no se hace de lado para que crean en Jesús. Saulo presenta a Saulo, todo el
tiempo. Él usurpa el trono de las palabras de Dios, el trono del Espíritu santo,
con sus propias palabras, con sus propias enseñanzas.)
10 Todos
los que viven por las obras que demanda la ley están bajo maldición, porque
está escrito: «Maldito sea quien no practique fielmente todo lo que está
escrito en el libro de la ley». 11 Ahora bien, es evidente que por la ley nadie es
justificado delante de Dios, porque «el justo vivirá por la fe». 12 La ley no se basa en la
fe; por el contrario, «quien practique estas cosas vivirá por ellas». 13 Cristo nos rescató de la
maldición de la ley al hacerse maldición por nosotros, pues está escrito:
«Maldito todo el que es colgado de un madero». 14 Así sucedió, para que,
por medio de Cristo Jesús, la bendición prometida a Abraham llegara a las
naciones, y para que por la fe recibiéramos el Espíritu según la promesa. (Saulo
toma cautiva la enseñanza del verdadero evangelio Jesús, en las
mentes de sus seguidores, con estas bien elaboradas frases, porque les hace
creer que serán justos y vivirán por la fe, si creen en el supuesto Jesús que
Saulo presenta, pero los desvía hacia Saulo, con astucia y finas falacias, y no
se dan cuenta.)
La
ley y la promesa
15 Hermanos,
voy a ponerles un ejemplo: aun en el caso de un pacto humano, nadie
puede anularlo ni añadirle nada una vez que ha sido ratificado. 16 Ahora bien, las promesas
se le hicieron a Abraham y a su descendencia. La Escritura no dice: «y a los
descendientes», como refiriéndose a muchos, sino: «y a tu
descendencia», dando a entender uno solo, que es Cristo. 17 Lo que quiero decir es
esto: La ley, que vino cuatrocientos treinta años después, no anula el pacto
que Dios había ratificado previamente; de haber sido así, quedaría sin efecto
la promesa. 18 Si
la herencia se basa en la ley, ya no se basa en la promesa; pero Dios se la
concedió gratuitamente a Abraham mediante una promesa. 19 Entonces, ¿cuál era el propósito de la
ley? Fue añadida por causa de las transgresiones hasta que viniera
la descendencia a la cual se hizo la promesa. La ley se promulgó por medio de
ángeles, por conducto de un mediador. 20 Ahora bien, no hace falta mediador si hay una sola
parte, y sin embargo Dios es uno solo. 21 Si esto es así, ¿estará la ley en contra de las
promesas de Dios? ¡De ninguna manera! Si se hubiera promulgado una ley capaz de
dar vida, entonces sí que la justicia se basaría en la ley. 22 Pero la Escritura
declara que todo el mundo es prisionero del pecado, para que mediante la
fe en Jesucristo lo prometido se les conceda a los que creen. 23 Antes de venir esta fe,
la ley nos tenía presos, encerrados hasta que la fe se revelara. 24 Así que la ley vino a
ser nuestro guía encargado de conducirnos a Cristo, para que fuéramos
justificados por la fe. 25 Pero,
ahora que ha llegado la fe, ya no estamos sujetos al guía. (Saulo
usa algo verdadero, y un dato muy interesante, que primero vino la promesa a
Abraham, luego vino la ley, y luego vino la gracia de Jesús. Pero en verdad la
ley remplazó a la promesa, que en verdad no era para toda la descendencia de
Abraham, puesto que el pueblo de Israel, no eran todos los descendientes de
Abraham, la ley no era para los hijos de Ismael, ni para los hijos de Esaú, la
ley era solo para el pueblo de Israel. Luego, la gracia de Jesús reemplazó a la
ley, puesto que la llevó a la perfección, y los doce apóstoles no nos obligaron
a seguir los mandatos de la ley de Moisés. Solo dejaron vigente de la ley “que
se abstengan de lo que fue sacrificado a los ídolos, y de sangre, y de ahogado,
y de fornicación”. Ver hechos 21:25. En esa fe en Jesús, que reemplazó a la
ley, en verdad no hay que poner en práctica las enseñanzas de Saulo. Pero Saulo
miente al apoderarse de la promesa y de la ley, con estas frases muy bien
entramadas, para que los suyos se queden en la supuesta fe que Saulo les está
enseñando, en muchos casos, con palabras que contradicen las enseñanzas de
Jesús.)
Hijos
de Dios
26 Todos
ustedes son hijos de Dios mediante la fe en Cristo Jesús, 27 porque todos los que han
sido bautizados en Cristo se han revestido de Cristo. 28 Ya no hay judío ni
griego, esclavo ni libre, hombre ni mujer, sino que todos ustedes son uno solo
en Cristo Jesús. 29 Y,
si ustedes pertenecen a Cristo, son la descendencia de Abraham y herederos
según la promesa. (Al leer
estas inteligentes frases, sus seguidores, dan por hecho que la fe en Saulo es
la misma fe en Cristo, y que el bautismo de Saulo es el mismo bautismo de
Cristo. Que el que reciba a Saulo como su Maestro celestial, aceptando que sus
cartas son palabras de Dios, también recibió a Cristo al recibir a Saulo. Aquí
da a entender que, siguiendo a Saulo, son hijos de Dios. Esto es suplantación,
usurpa el trono de Cristo. Pero es muy sutil. Y ha engañado y seducido a la
mayor parte de la cristiandad, durante dos mil largos años.)
Epístola de Pablo a los gálatas
Nueva Versión Internacional (NVI)
Capítulo
4
1 En otras palabras, mientras el heredero es menor
de edad, en nada se diferencia de un esclavo, a pesar de ser dueño de todo. 2
Al contrario, está bajo el cuidado de tutores y administradores hasta la fecha
fijada por su padre. 3 Así también nosotros, cuando éramos menores, estábamos
esclavizados por los principios de este mundo. 4 Pero, cuando se cumplió el
plazo, Dios envió a su Hijo, nacido de una mujer, nacido bajo la ley, 5 para
rescatar a los que estaban bajo la ley, a fin de que fuéramos adoptados como
hijos. 6 Ustedes ya son hijos. Dios ha enviado a nuestros corazones el Espíritu
de su Hijo, (estas frases son excelentes, nada tienen en sí
mismas de falacias. Pero, sin que se den cuenta, Saulo se proclama portador del
Espíritu Santo, diciendo que Dios Padre envió al corazón de él, directamente,
el Espíritu de Jesús. No dice que necesitó saber las enseñanzas de Jesús y
recibirlas como palabras sagradas, de Dios. Saulo pretende que sus enseñanzas
sean vistas como el mismo Espíritu Santo. Según estas palabras, terminas
creyendo que no eres esclavo, sino hijo y heredero, terminas creyendo todo
esto, por las enseñanzas de Saulo. Está ahí, interpuesto entre Jesús y los
cristianos, que le aceptan sus epístolas como palabras de Dios, pero no se ve
interpuesto a Saulo. Esa es la habilidad del grandioso Saulo, esa es su
maestría.) que clama: « ¡Abba! ¡Padre!» 7
Así que ya no eres esclavo, sino hijo; y, como eres hijo, Dios te ha hecho
también heredero.
Preocupación
de Pablo por los gálatas
8 Antes, cuando no conocían a Dios, ustedes eran
esclavos de los que en realidad no son dioses. 9 Pero, ahora que conocen a Dios
—o más bien que Dios los conoce a ustedes—, (Saulo está perdido,
con la historia del pueblo de Israel, en estas palabras, y las contradice más
adelante, en el versículo 21, donde acepta que en la región del Asia menor sí
son muy conocedores de la ley de Moisés. Los gálatas no son nuevos en el tema
del Dios de Israel, ni, mucho menos, son gentiles, que ignoran la ley de Moisés.
Jesús que, si es Maestro en el tema, envió a sus apóstoles, y a los otros
discípulos, que seguían las enseñanzas del Mesías, entre los cuales no estaba
Saulo, los envió a las ovejas pérdidas de la casa de Israel, del Ponto,
Galacia, Capadocia, Asia y Bitinia, llamada hoy Asia menor. Obviamente, los
habitantes de esta región, conocían las tradiciones judías y conocían la
promesa a Abraham y su descendencia. Las iglesias del Asia menor, no eran tan
lejanas al pueblo de Israel y a la Ley de Moisés como los pueblos gentiles.) ¿cómo
es que quieren regresar a esos principios ineficaces y sin valor? ¿Quieren
volver a ser esclavos de ellos? 10 ¡Ustedes siguen guardando los días de
fiesta, meses, estaciones y años! 11 Temo por ustedes, que tal vez me haya
estado esforzando en vano. (Saulo, el ególatra, los corrompe con su desbordado
ego, les cobra el haberles llevado el evangelio, de Saulo. No les habla del
esfuerzo de Jesús. Esta desafortunada frase, entre muchas de igual valor, es un
ejemplo de lo que no debe escribirse si eres cristiano.)
12 Hermanos, yo me he identificado con ustedes. Les
suplico que ahora se identifiquen conmigo. (Aquí va la suplantación
del Mesías, aquí se interpone entre Jesús y los cristianos, que reconocen estas
frases como palabras de Dios. ¿Cómo no se dan cuenta que es un lobo romano
vestido de piel de oveja israelita? ¿Cómo no rechazan este descaro? Deben
identificarse con Jesús, no con ese insignificante hombre, pecador e
imperfecto, como todos nosotros. Saulo nunca debería hacerles perder el rumbo a
sus seguidores y debería siempre llevarlos a Jesús y más si es reconocido como
palabra de Dios, por ellos en su ignorancia. Pero por esto es que Saulo es el
hábil y grandioso anticristo.) No es que me hayan ofendido en algo. (Es muy
prepotente. Centra la atención de los lectores en la persona de Saulo, no en
Jesús. Pero es sutil. La gente no se da cuenta, por lo sutil y parece esta una
frase de lo más cariñosa y humana. Pero si es la “palabra de Dios”, si es una
guía para los pastores, es veneno, es degeneración, es corrupción, es
totalmente opuesta esta frase a la humildad verdadera cristiana. Da por sentado
que es su autoridad, no su siervo. Creyendo en frases como estas, y siguiendo
este pésimo ejemplo, es que se han extraviado los miles de millones de
pastores, que se creen líderes del rebaño y no sus siervos, se creen los
primeros y no los últimos.) 13 Como bien saben, la primera vez que les prediqué
el evangelio fue debido a una enfermedad, 14 y, aunque esta fue una prueba para
ustedes, no me trataron con desprecio ni desdén. Al contrario, me recibieron
como a un ángel de Dios, como si se tratara de Cristo Jesús. (Sigue
la suplantación que no ven, que les parece de lo más tierno, pero estas frases
son, sí, de un ángel, pero del lado oscuro, camuflado tan perfectamente como
ángel de luz. Les hace pensar que se trataba de Jesús, cuando lo recibieron a
él, a Saulo. Suplantación es lo que leen, y no la ven. Viendo no ven.) 15 Pues bien, ¿qué pasó con todo ese
entusiasmo? Me consta que, de haberles sido posible, se habrían sacado los ojos
para dármelos. 16 ¡Y ahora resulta que por decirles la verdad me he vuelto su
enemigo! (Sigue interponiéndose
Saulo entre sus lectores y Jesús, al cual debería de respetar. ¿No ven lo
evidente? Recurre Saulo a palabrería sentimental, que está muy lejos de ser
palabra de Dios. Recurre, sin vergüenza, al chantaje emocional, incluyendo la
exageración, burlándose de ellos en sus caras, por lo controlados que los
tenía, que hasta se sacarían los ojos por él. ¿Cómo se tragan esta basura y la
reciben como palabras de Dios mismo?)
17 Esos que muestran mucho interés por ganárselos a
ustedes no abrigan buenas intenciones. Lo que quieren es alejarlos de nosotros
para que ustedes se entreguen a ellos. (En esta frase aparentemente
inofensiva se está creando lo que hoy se ve en todas las congregaciones, se
inician en los seguidores de Saulo, los celos, la posesión de las ovejas, para
explotarlas y exprimirles los bienes materiales, con argucias y artimañas. Que
tan lejos están esas palabras de Saulo, de las de Jesús, que tan lejos están de
la libertad en Jesús. Si usted es cristiano, no es propiedad de Saulo, ni de ningún
pastor, o padre, o congregación, ni tiene que estar pidiendo cartas para los
pastores de otras ciudades, a menos que sea un fariseo hipócrita, que desea ser
reconocido, a su vez, por esas personas y merece ser engañado por Saulo en este
burdo comercio ilegal de ovejas.) 18
Está bien mostrar interés, con tal de que ese interés sea bien intencionado y
constante, y que no se manifieste solo cuando yo estoy con ustedes. (Está
diciéndoles lo importante que es Saulo, está diciéndoles lo que se pelean por
él y la cantidad de trampas que hacen cuando él está con ellos. Roba descaradamente
el lugar del Cristo.) 19 Queridos hijos, por quienes vuelvo a sufrir
dolores de parto hasta que Cristo sea formado en ustedes, (Es un
usurpador de Cristo. Les dice que él, Saulo, es quien les va a formar a Cristo
en sus corazones, con sus enseñanzas, si las toman como palabras de su Dios, es
decir, si lo adoran. Les dice que los dolores de parto como cristianos no son
del espíritu santo, ni de Cristo, sino de Saulo. Atrevido, impostor. Esta es
una de las señales del anticristo, que sedujo a las naciones y consiguió que lo
adoraran. Una gran parte de todas las frases de Saulo,
son esta misma repetición del personaje, esta afirmación de su ego, este mal ejemplo
a los pastores del rebaño, este contradecir y pisotear la humildad necesaria
enseñada con palabras y hechos por Jesús. Humildad sin la cual uno no es
cristiano, haga lo que haga y diga lo que diga.) 20 ¡cómo quisiera estar ahora con
ustedes y hablarles de otra manera, porque lo que están haciendo me tiene
perplejo! (esta frase implica chantaje
y amenaza vedada. Puede uno pensar de cómo sería esa otra manera de tratarlos.
Como ya ha intimidado a los corintios, los amenaza con, tal vez, ir y regañarles,
castigarles, y ser duro con ellos. Lo cual no puede ser en un cristiano
verdadero, un cristiano no es juez ni castigador, y menos en un líder, a quien
todos sus extraviados seguidores imitan, creyendo que hacen las obras de
Cristo.)
Agar
y Sara
21 Díganme ustedes, los que quieren estar bajo la
ley: ¿por qué no le prestan atención a lo que la ley misma dice? 22 ¿Acaso no
está escrito que Abraham tuvo dos hijos, uno de la esclava y otro de la libre?
23 El de la esclava nació por decisión humana, pero el de la libre nació en
cumplimiento de una promesa. (Aquí se ve que era una
contradicción al hablar a lo gálatas como si fuesen gentiles. Ver versículo 8.
Aquí sí les habla como a conocedores de la ley.) 24 Ese relato puede interpretarse en
sentido figurado: estas mujeres representan dos pactos. Uno, que es Agar,
procede del monte Sinaí y tiene hijos que nacen para ser esclavos. 25 Agar
representa el monte Sinaí en Arabia, y corresponde a la actual ciudad de
Jerusalén, porque junto con sus hijos vive en esclavitud. 26 Pero la Jerusalén
celestial es libre, y esa es nuestra madre. 27 Porque está escrito: «Tú, mujer
estéril que nunca has dado a luz, ¡grita de alegría! Tú, que nunca tuviste
dolores de parto, ¡prorrumpe en gritos de júbilo! Porque más hijos que la
casada tendrá la desamparada». 28 ustedes, hermanos, al igual que Isaac, son
hijos por la promesa. 29 Y así como en aquel tiempo el hijo nacido por decisión
humana persiguió al hijo nacido por el Espíritu, así también sucede ahora. 30
Pero ¿qué dice la Escritura? «¡Echa de aquí a la esclava y a su hijo! El hijo
de la esclava jamás tendrá parte en la herencia con el hijo de la libre». 31
Así que, hermanos, no somos hijos de la esclava, sino de la libre. (Igual que dice aquí Saulo de la descendencia de
Abraham, sucede en el cristianismo: hay dos iglesias en una sola. La iglesia
que sigue a Saulo y acepta sus enseñanzas como palabras de Dios, esa es la ramera,
es la gran babilonia, es Jezabel, es la loba romana, igual que romano e israelí
es Saulo. Saulo es el césar romano espiritual. No se dieron cuenta, y está
seduciendo y extraviando a las naciones, como está escrito de él. Esa que se dejó
extraviar hacia Saulo, es la iglesia que no es de la promesa de Jesús, aunque
comparte al mismo padre celestial con la verdadera iglesia pura, que es aquella
iglesia que no se contaminó, siguiendo y adorando enseñanzas de hombres. Es la
que adora las enseñanzas de Jesús, y las de nadie además de él, como palabras
de Dios, esa es la virgen sensata, que se desposará con el Mesías. Todas las
vírgenes conviven hasta el día final, cuando las vírgenes necias, las que
adoraron las enseñanzas de Saulo, se quedarán por fuera. Todo esto que Saulo
está diciendo de Agar y Sara se cumple en los seguidores de Saulo. Saulo es
Agar y su descendencia es la descendencia de Agar.
Epístola de Pablo a los gálatas
Nueva Versión Internacional (NVI)
Capítulo
5
Libertad
en Cristo
1
Cristo nos libertó para que vivamos en libertad. Por lo tanto, manténganse
firmes y no se sometan nuevamente al yugo de esclavitud. 2 Escuchen
bien: yo, Pablo, (Ego al máximo, totalmente contrario a las
enseñanzas de Jesús. Centra la atención de los lectores en él, no en Jesús. Es
atrevido y audaz. Si aceptan que este “yo Pablo” es palabra de Dios, están
aceptando a Pablo al lado de Jesús en su trono, en igualdad de divinidad con
Jesús. Es la abominable desolación en el lugar que no debe.) les digo que,
si se hacen circuncidar, Cristo no les servirá de nada. 3 De nuevo declaro que
todo el que se hace circuncidar está obligado a practicar toda la ley. 4
Aquellos de entre ustedes que tratan de ser justificados por la ley han roto
con Cristo; han caído de la gracia. (Esto es mentira. Una persona se puede
circuncidar y luego ver que eso no es algo importante y Cristo si llegar a servirle
para salvación de su alma, aunque su cuerpo esté circuncidado. Es mentira,
además, que el que se circuncide esté obligado a practicar toda la ley.
Cualquiera se puede circuncidar en un momento pensando que sea algo necesario,
pero luego dejar de lado esos ensayos, y centrarse en las palabras del
evangelio de Jesús.) 5 Nosotros, en cambio, por obra del Espíritu y
mediante la fe, aguardamos con ansias la justicia que es nuestra esperanza. 6
En Cristo Jesús de nada vale estar o no estar circuncidados; lo que vale es la
fe que actúa mediante el amor. (Obviamente se ve que hay un interés de desviar a
los lectores, a que crean que es la fe, por medio del espíritu que Saulo les
trae, en nombre de Jesús, en las enseñanzas de Saulo, que se tiene esa
esperanza. Saulo por eso dice que ellos por obra del espíritu y mediante la
fe……)
7
Ustedes estaban corriendo bien. ¿Quién los estorbó para que dejaran de obedecer
a la verdad? (Les está recriminando, una vez más, de muchas
reciminaciones, que no sigan las enseñanzas de Saulo, como la verdad total, que
no crean que deban ir a Jesús a través de Saulo. Saulo les vende la idea que
fueron alejados, extraviados de la verdad de Saulo.) 8 Tal
instigación no puede venir de Dios, que es quien los ha llamado. (Saulo es
el verdadero instigador, con estas epístolas.)
9
«Un poco de levadura fermenta toda la masa». 10 Yo por mi parte confío en el
Señor que ustedes no pensarán de otra manera. El que los está perturbando será
castigado, sea quien sea. 11 Hermanos, si es verdad que yo todavía predico la
circuncisión, ¿por qué se me sigue persiguiendo? Si tal fuera mi predicación,
la cruz no ofendería tanto. 12 ¡Ojalá que esos instigadores acabaran por
mutilarse del todo! (estás frases no pueden ser palabra de Dios. Mucho
menos del Dios del amor. Ni proceden de la paciencia, ni de la comprensión, ni
del perdón, y toda esta bajeza humana la compran los lectores de Saulo como
enseñanzas altísimas, absolutas, incuestionables y sagradas. Que ingenuidad. En
realidad son palabras de un individuo humano enardecido y llevado de bajas
pasiones, que desea que sus contradictores sean violentados.)
13
Les hablo así, hermanos, porque ustedes han sido llamados a ser libres; pero no
se valgan de esa libertad para dar rienda suelta a sus pasiones. Más bien
sírvanse unos a otros con amor. 14 En efecto, toda la ley se resume en un solo
mandamiento: «Ama a tu prójimo como a ti mismo». (Saulo se
equivoca en esta enseñanza humana, no previó que esta ley de Moisés era
imperfecta, puesto que quien se ame mal a sí mismo, ¿entonces tiene licencia de
amar mal a los demás? Quien no se ame a sí mismo, quien tenga baja autoestima,
quien aborrece su vida, y hay muchos así, ¿entonces debe “amar” igual de mal a
su prójimo? Esta ley de amar al prójimo “como a sí mismo”, no es lo mismo que aquella
que dice que con la medida con que midieres seréis medidos, de Jesús. La ley
perfecta la enseñó Jesús cuando enseñó: ámense los unos a los otros, pero no
como se aman a sí mismos, sino como Jesús los ha amado, es decir: ámense de una
forma perfecta. No esa forma imperfecta y egoísta de amar que conocen en el
mundo. Esto de amar como Jesús, no como nos amamos ahora a nosotros mismos, es
otra ley superior y no la ley de Moisés y de Saulo, que están comiendo como
palabras de Dios mismo.) 15 Pero, si siguen mordiéndose y
devorándose, tengan cuidado, no sea que acaben por destruirse unos a otros.
La
vida por el Espíritu
16
Así que les digo: Vivan por el Espíritu, y no seguirán los deseos de la
naturaleza pecaminosa. 17 Porque esta desea lo que es contrario al Espíritu, y
el Espíritu desea lo que es contrario a ella. Los dos se oponen entre sí, de
modo que ustedes no pueden hacer lo que quieren. 18 Pero, si los guía el
Espíritu, no están bajo la ley. (Saulo escribe verdad en estos párrafos.) 19 Las obras
de la naturaleza pecaminosa se conocen bien: inmoralidad sexual, impureza y
libertinaje; 20 idolatría y brujería; odio, discordia, celos, arrebatos de ira,
rivalidades, disensiones, sectarismos 21 y envidia; borracheras, orgías, y
otras cosas parecidas. Les advierto ahora, como antes lo hice, que los que
practican tales cosas no heredarán el reino de Dios. (Saulo es
magistral sobre las obras de la naturaleza pecaminosa, las describe tan
precisas, como directo conocedor. Pero traspasa las enseñanzas de Jesús, puesto
que todos hemos practicado tales cosas, aún después de arrepentirnos de
haberlas hecho. Esos hechos malos no dejan de estar en nuestro pasado, ni en
nuestro presente. Cada que usted repite un pecado, lo convierte en un evento
más de una práctica que es de por sí, continua. Así todos los pecados son una
práctica continua. Cuando usted conoce que no debe hacer algo y lo hace, así es
como pecamos todos los cristianos. Y si alguno peca, abogado tenemos para con
el Padre, Jesucristo. Según enseña Juan en su epístola. Esta frase de Saulo es
una trampa para desanimar a los cristianos y no es verdadera. A pesar de los
pecados repetidos, uno debe tener perseverancia, en hacer el bien y en
arrepentirse. Vencer con el bien el mal, según las propias palabras de Saulo. No
desanimarse porque nunca va a ser perfecto y, según Saulo, no entrará en el
reino de Dios.)
22
En cambio, el fruto del Espíritu es amor, alegría, paz, paciencia, amabilidad,
bondad, fidelidad, 23 humildad y dominio propio. No hay ley que condene estas
cosas. 24 Los que son de Cristo Jesús han crucificado la naturaleza pecaminosa,
con sus pasiones y deseos. 25 Si el Espíritu nos da vida, andemos guiados por
el Espíritu. 26 No dejemos que la vanidad nos lleve a irritarnos y a
envidiarnos unos a otros. (Esta es una de las enseñanzas de Saulo que más me
ha fascinado y que ha quedado grabada en mi mente. Me parece verdadera y muy
alta en sabiduría, casi sublime. Obviamente, no creo que por ser sublime, y por
ser verdadera, y por estar en mi mente, sea palabra de Dios sagrada. Es palabra
sabia de Saulo. Nada más.)
Epístola de Pablo a los gálatas
Nueva Versión Internacional (NVI)
Capítulo
6
La
ayuda mutua
1
Hermanos, si alguien es sorprendido en pecado, ustedes que son espirituales
deben restaurarlo con una actitud humilde. (Esta es otra de las muchas frases de difícil
inteligencia, y fáciles de mal interpretar de Saulo, según lo dijo el verdadero
apóstol Pedro. Esta frase se contrapone
a la enseñanza de Jesús, que dice que primero hay que ver cómo sacar la viga
del ojo propio, y luego se podrá ver cómo sacar la paja del ojo ajeno. Siguiendo
mal esta ambigua enseñanza de Saulo, miles de millones de cristianos, llenos de
errores, se la pasan tratando de sacar a otros de los errores. Jesús llamaba a
esto actitud de hipócritas. Jesús sabía lo que tenía que advertir sobre las
falacias que vendrían, adentro del cristianismo, a tal punto que extraviarían,
si posible fuere, a los mismos elegidos. Obviamente Jesús habla de la
hipocresía de los fariseos, secta a la que siempre perteneció Saulo. Es un
peligro si llegas al planeta tierra, y te dicen que, para llegar al reino de
los Cielos, debes tragarte todas estas frases como palabra sagrada, cuando son
frases un tanto irresponsables para ser verdad absoluta, para ser palabra de
Dios.) Pero
cuídese cada uno, porque también puede ser tentado. 2 Ayúdense unos a otros a
llevar sus cargas, y así cumplirán la ley de Cristo. 3 Si alguien cree ser
algo, cuando en realidad no es nada, se engaña a sí mismo. 4 Cada cual examine
su propia conducta; y, si tiene algo de qué presumir, que no se compare con
nadie. (En el cristianismo nadie tiene “algo” que presumir, y menos, alguien, no
debe creer ser “algo”. En esta frase, Saulo les pone lazo de cazador a sus
inocentes seguidores, para incitarlos a ser soberbios, a pensar que es normal
creer ser importante, o creerse más santo que los demás. Esto es anti-cristiano.)
5
Que cada uno cargue con su propia responsabilidad. (En esta
frase contradice lo que dijo en el versículo 1, dónde les dice que los más
espirituales deben restaurar a los que sean “sorprendidos” en pecado. Pero esta
última frase nada tiene que ver con el párrafo. Lean el párrafo con
independencia de criterio, y verán que concluye algo que nada tiene que ver.)
6
El que recibe instrucción en la palabra de Dios comparta todo lo bueno con
quien le enseña. (Esta imprudente y desafortunada frase, ha sido
usada por los mercaderes de la fe, de todos los lugares y tiempos, para abusar
del rebaño. Es que creen que esta frase es palabra de Dios, no una palabra de
un humano, que pudo haberse equivocado, al escribir una frase, que iba a servir
para los mercenarios y mercaderes, explotar y defraudar a las cándidas ovejas.)
7
No se engañen: de Dios nadie se burla. Cada uno cosecha lo que siembra. 8 El
que siembra para agradar a su naturaleza pecaminosa, de esa misma naturaleza
cosechará destrucción; el que siembra para agradar al Espíritu, del Espíritu
cosechará vida eterna. 9 No nos cansemos de hacer el bien, porque a su debido
tiempo cosecharemos si no nos damos por vencidos. 10 Por lo tanto, siempre que
tengamos la oportunidad, hagamos bien a todos, y en especial a los de la
familia de la fe. (Además, es propio del estilo de Saulo, usar frases
que son amenazas vedadas, como para empujarlos a ser “muy generosos” con los
predicadores.)
No
la circuncisión, sino una nueva creación
11
Miren que les escribo de mi puño y letra, ¡y con letras bien grandes! (Esta
frase es evidente del anti-cristo, de su personalidad prepotente y de sus falaces
enseñanzas, con las que ha extraviado al mundo entero. Es amenazante. Está
gritándoles con palabras escritas, como les impone el personaje disque
importante. Es increíble, cómo con tanta ingenuidad, le reciben esta
imprudencia, esta desfachatez, como palabras de su Dios. Les escribe “él, de su
puño y letra y con letras bien grandes”. Que ego, que soberbia, que
engreimiento, al pie de la humildad de Jesús. Con razón ha confundido a tantos
miles de millones.) 12 Los que tratan de obligarlos a ustedes a
circuncidarse lo hacen únicamente para dar una buena impresión y evitar ser
perseguidos por causa de la cruz de Cristo. 13 Ni siquiera esos que están
circuncidados obedecen la ley; lo que pasa es que quieren obligarlos a ustedes
a circuncidarse para luego jactarse de la señal que ustedes llevarían en el
cuerpo. 14 En cuanto a mí, jamás se me ocurra jactarme de otra cosa (De la
cruz de Cristo uno no se jacta. Aprende: uno mira la cruz de Cristo, como algo
en verdad sagrado, algo que no se puede manosear, o irrespetar, como lo hace el
atrevido Saulo, sino que se mira con respeto y con reverencia, cómo algo que es
solo de Jesús, y de nadie además de Él.) sino de la cruz de nuestro
Señor Jesucristo, por quien el mundo ha sido crucificado para mí, y yo para el
mundo. (Saulo juega con sus mentes, diciéndoles que nada es estar circuncidado,
pero crucificado sí, y los lleva a un mundo de falacias, donde le creen que él,
Saulo, está crucificado para el mundo, igual que Cristo. Haga de cuenta, se les
presenta como un salvador igual que Jesús. Y estas mentiras son enseñadas a los
niños y jóvenes en el plantea como las palabras de Dios, que no se pueden
cuestionar. Vaya ingenuos.) 15 Para nada cuenta estar o no estar
circuncidados; lo que importa es ser parte de una nueva creación. 16 Paz y
misericordia desciendan sobre todos los que siguen esta norma, y sobre el
Israel de Dios. (Obviamente Saulo les hace creer a los suyos que,
adorando las enseñanzas de Saulo, como palabras infalibles y eternas de Dios,
hacen parte de esa nueva creación con la que los está llevando al extravío.)
17
Por lo demás, que nadie me cause más problemas, (Se declara a sí mismo “la gran cosa”.
Ego más grande y mentiroso que ese de Saulo, difícil de hallar. Los hace tener
complejos de culpa, a sus lectores, como si lo estuvieran molestando en su
trono celestial, donde lleva las cicatrices de Cristo. Esto son necedades,
tonterías, abominaciones. Que desgracia para los extraviados, tener que creer semejantes
blasfemias como palabras de Dios.) porque yo llevo en el cuerpo las
cicatrices de Jesús. (Esta frase es una abominación, es una blasfemia.
De esta mentira se han dejado llevar, algunos “santos”, para desear tener los
estigmas, las heridas de los clavos de la cruz de Jesús. Es pretencioso desear
tener las cicatrices de Jesús, que son únicas de Él. Aquí se ve con claridad la
abominable usurpación del trono de Jesús por parte de Saulo haciendo adorar sus
palabras como si fueran de igual valor de las de Jesús.)
18
Hermanos, que la gracia de nuestro Señor Jesucristo sea con el espíritu de cada
uno de ustedes. Amén.